Todo lo que debes saber sobre la cuenta 473

La legislación española es bastante exhaustiva en lo que se refiere a la regulación de la contabilidad de las empresas, una de las más importantes es la cuenta 473, referida a las retenciones y a los pagos a cuenta con respecto al impuesto de sociedades o el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF).

A continuación te explicamos todo lo que debes saber sobre la cuenta 473.

 

Qué son las retenciones y pagos a cuenta

Por imposición de la Ley General Tributaria, las empresas y los profesionales que abonan determinadas rentas (por ejemplo una nómina, o que pagan una factura a otra empresa o autónomo) quedan obligadas a retener al perceptor de las mismas una cantidad de dinero e ingresar el mismo en Hacienda. Estos ingresos son un anticipo de la cuota del impuesto que más tarde tendrá que pagar el perceptor de la renta.

Una retención consiste en detraer una determinada cantidad de los rendimientos o rentas que se tiene la obligación de abonar. El ingreso a cuenta es el siguiente paso, porque, a través de él, se declaran las cantidades que se han retenido y se ingresan en el tesoro, en la forma y plazo establecido legalmente. Por ejemplo, si una empresa tiene empleados, debe practicar en sus nóminas la correspondiente retención de IRPF y luego hacer el ingreso a cuenta. Es decir, detrae una cantidad del salario del empleado y lo ingresa directamente en Hacienda, a cuenta del pago del IRPF del trabajador.

Como sujeto de obligaciones tributarias, la empresa también es objeto de retenciones y de ingresos a cuenta de tributos que le corresponde pagar, como el impuesto de sociedades, y es en estos casos donde cobra importancia la cuenta 473.

Cuándo se usa la cuenta 473

En la cuenta 473 quedan reflejados los siguientes datos:

• Las cantidades que otros profesionales o empresas han retenido a la empresa. Por ejemplo, la retención por alquileres o la retención que se aplica por dividendos.
• Las cantidades que la empresa ingresa en Hacienda a cuenta del pago de impuestos que serán exigibles en un momento posterior, como el impuesto de sociedades. Si se trata de un autónomo, el ingreso a cuenta lo será del IRPF.

Por lo tanto, la cuenta 473 recoge los importes que ya se han abonado a Hacienda en concepto de adelanto por el impuesto de sociedades o el IRPF. Cuando llegue el momento de declarar el impuesto, la Agencia Tributaria tendrá en cuenta lo que ya se le ha pagado y, con base en ello, determinará si el contribuyente tiene que abonar más dinero, si se queda como está o si debe percibir una devolución por haber pagado de más.

En esta cuenta se refleja en el balance de la empresa como parte de los pasivos, ya que representa impuestos que se han pagado por adelantado y que serán ajustados al cierre del ejercicio fiscal, cuando llegue el momento de presentar la correspondiente declaración tributaria.

La cuenta 473 se aplica cuando un autónomo emite facturas con retención por ir destinadas a una empresa o a otro autónomo, para realizar los pagos a cuenta del pago fraccionado del impuesto de sociedades y en el cobro de dividendos.

Funcionamiento de la cuenta 473

Cada vez que se aplica una retención o se hace un ingreso a cuenta, se debe efectuar un asiento contable en esta cuenta que deje constancia de la operación realizada.

En el caso de utilizarse el modelo 202 de pagos a cuenta del impuesto de sociedades, se dejará constancia de los tres pagos que se hacen a lo largo del año. Si la empresa no tiene liquidez suficiente y solicita el aplazamiento del pago, también se deja constancia de esta circunstancia.

Lo primero que se hace es cargar el importe de la retención, o del pago a cuenta, con abono a las cuentas del grupo 5 y del grupo 76 (con carácter general). Es decir, que se realizan anotaciones en el debe de la contabilidad financiera. Se abona (se anota en el haber de la cuenta contable) de dos maneras:

• Mediante el monto de las retenciones soportadas y los ingresos a cuenta del impuesto sobre sociedades efectuados, hasta alcanzar la cuota líquida del período. Este abono se carga en la cuenta 6300.
• A través del monto de las retenciones soportadas e ingresos a cuenta del impuesto sobre sociedades que deben ser reembolsadas a la empresa. Este abono se carga en la cuenta 4709.

Una buena gestión de la cuenta 473 es imprescindible para comprobar que se está llevando a cabo un correcto cumplimiento de las obligaciones tributarias, lo cual le ahorrará a la empresa o al profesional posibles inspecciones de Hacienda, sanciones y el pago de intereses de demora y de recargos.

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