Cómo mejorar la productividad laboral
Toda empresa que busca mejorar su situación económica, tiene dos opciones: aumentar ingresos o disminuir gastos. Mejorar la productividad laboral puede ayudar a mejorar ambas; por un lado, aumenta la eficiencia del personal, porque minimiza el tiempo que tarda para realizar su trabajo y, con ello, los gastos. Por otro, aumentan los ingresos, porque con el mismo tiempo empleado, su rendimiento aumenta. Pero… Cómo podemos hacerlo? En Sabbatic lo analizamos.
Índice
Qué es la productividad laboral
La productividad laboral es un índice que mide la eficiencia de un trabajador y se calcula obteniendo el valor de dividir su producción por una unidad de tiempo aunque existen diferentes fórmulas para medir la productividad de una empresa. Si se enfoca a una empresa en general, es la relación existente entre lo que cuestan los servicios, o bienes producidos, y las horas empleadas para ello.
Este valor se considera muy interesante para una empresa porque es capaz de medir la productividad de los empleados y gracias a él, es posible identificar a aquel que su rendimiento está por debajo del esperado. Al mismo tiempo, este concepto se emplea al nivel de la economía de un país para calcular su PIB (producto interior bruto).
Cuando se habla de productividad laboral, hay que tener en cuenta lo siguiente:
- Mide una producción en función de las horas de trabajo necesarias para llevarla a cabo.
- Debe ser directamente proporcional a la inversión de capital y al desarrollo tecnológico.
- Tanto las empresas como los gobiernos de los países pueden provocar su incremento realizando inversiones o creando incentivos para desarrollar la tecnología o el capital humano.
Consejos para mejorar la productividad
Todo éxito empresarial o económico se basa en saber cómo aumentar la productividad. Es el quid de la cuestión… Pero no hay que perder de vista la lógica de todo esto; los beneficios económicos de una actividad se basan en la diferencia que hay entre los ingresos y gastos de la empresa. Sí, aumentar la productividad es interesante, pero sin caer en costes excesivos que pueden hacer que una empresa sea más productiva, pero menos rentable.
Conseguir un aumento de productividad en el trabajo implica tener en cuenta las peculiaridades que tiene cada organización. Por ello, a la hora de implementar las soluciones, deben estudiarse qué medidas van a ser positivas para ello y cuáles no van a funcionar.
De carácter general, hay varias acciones que ayudan a conseguir una mayor productividad en una empresa. Las citamos a continuación.
Favorecer el trabajo en equipo
Aquellas tareas que se realizan de forma conjunta pueden conseguir mejores resultados fomentando un espíritu de cooperación que potencie fortalezas y disminuya debilidades. Un ambiente laboral propicio y una buena gestión del trabajo en equipo implica una mayor eficiencia y un incremento de productividad.
Mejorar la comunicación
Fomentar una buena comunicación entre todos los departamentos de una organización contribuye a aumentar la eficacia del trabajo. El trabajador rinde mucho más cuando se siente escuchado y si piensa que sus opiniones son bien valoradas, su implicación se incrementa.
Tanto el estrés como las bajas laborales son una auténtica losa en la productividad de una empresa. Si el empleado no trabaja, no produce. Y si lo hace mal, apenas consigue eficiencia.
Las condiciones de trabajo y aumentar la seguridad laboral son unas de las medidas más empleadas por parte de la dirección de una organización, porque es una de las respuestas más lógicas a la pregunta de cómo mejorar la productividad.
Para ello, es necesario una identificación de riesgos y poner a disposición las herramientas necesarias para que no se produzcan. Por otro lado, invertir en una mejora de instalaciones y favorecer las condiciones del entorno del trabajo contribuye a incrementar el bienestar de los trabajadores y que puedan realizar sus obligaciones de forma más efectiva.
Recompensar a los trabajadores
Es lógico pensar que un buen salario fomenta un trabajador contento, pero también puede haber otros beneficios que consigan el mismo efecto. Jornadas intensivas, teletrabajo, redistribución de las vacaciones o permitir pausas de descanso son medidas muy efectivas que contribuyen a la conciliación laboral y que crean satisfacción en el personal laboral. Tomar en consideración las posibles demandas de los trabajadores los hace estar contentos y eso se traduce en un aumento en la producción empresarial.
Fomentar la preparación de los trabajadores
Es un hecho que cuanto más capacitada sea una persona, mayor productividad en el trabajo tendrá. Mejorar las aptitudes profesionales de un trabajador puede conseguirse mediante formación, pero también con el uso de herramientas que detectan sus habilidades para una reorientación en sus responsabilidades o, si fuera necesario, para atribuirle otras.
Esto no significa una reorganización de los puestos de trabajo para una reducción de costes laborales, sino para tratar de aumentar la productividad recurriendo a soluciones que forman parte de una reestructuración inteligente. En algunos casos, valorar el coaching para hacer una transformación en una empresa que esté orientada en la capacitación de sus empleados para aprovechar su potencial, puede verse recompensada por grandes beneficios en su productividad.
Todos los ejemplos anteriores son muy efectivos para saber cómo mejorar la productividad empresarial. Pero no podemos olvidarnos de las posibilidades que brinda el aprovechamiento de la tecnología puesta al servicio de los trabajadores. Un buen ejemplo es nuestra herramienta de gestión de gastos que permite digitalizar tickets y facturas con el consiguiente ahorro de tiempo de gestión para la empresa, lo que se traduce en un aumento de la productividad.