Qué significan las exenciones en el ámbito fiscal y tributario

Tener claro qué significan las exenciones es algo de vital importancia para cumplir con las obligaciones tributarias de manera correcta, evitando con ello posibles sanciones por parte de la Agencia Tributaria.

Las exenciones pueden aplicarse con respecto a diferentes tributos, pero solo cuando se dan los requisitos expresamente previstos en la normativa para ello.

 

Qué significan las exenciones

Una exención significa que una persona no está sometida o sujeta a una determinada obligación que, generalmente, suele ser gravosa.

La característica principal de este concepto es que se trata de una excepción. La regla general es que el sujeto tiene que hacer frente a una determinada obligación. Sin embargo, cuando opera la exención, ese mismo sujeto queda liberado del cumplimiento de esa obligación.

Aunque ahora lo vamos a ver con más detalle, dentro del ámbito tributario y fiscal, la exención implica que una persona física o jurídica no tiene que soportar una determinada carga fiscal, o impuesto, por el ejercicio de una actividad o la obtención de rentas.

Qué implican las exenciones en el ámbito fiscal y tributario

Las leyes que regulan cada uno de los tributos establecen una serie de hechos imponibles o supuestos de hecho. Cuando estos se producen, nace la obligación tributaria.

En los supuestos de exención, el hecho imponible se produce, pero, por disposición legal, el contribuyente no está obligado a pagar el impuesto. Y luego están los casos de no sujeción, que son algo diferente. En estos, se entiende que en ningún caso se realiza el hecho imponible o el supuesto de hecho que da lugar al nacimiento de la obligación tributaria y, en consecuencia, el sujeto no está obligado a soportar una carga impositiva.

La exención se articula en torno a dos normas de sentido contrapuesto. Por un lado, la norma de sujeción, que determina el supuesto de hecho que hace nacer la obligación tributaria principal. Por otro lado, la de la exención, que determina qué, a pesar de haberse realizado el hecho imponible, no hay obligación de pagar la cuota tributaria. Es decir, de cumplir con la obligación tributaria principal.

Las exenciones están fundamentadas en el respeto a principios básicos del derecho tributario como el de capacidad económica, y el de cumplimiento de fines sociales o económicos.

Tipos de exenciones

Exenciones en el IVA

Hablamos de IVA exento cuando se lleva a cabo una entrega de bienes o prestación de servicios que, por su naturaleza, implica el nacimiento de la obligación de aplicar el impuesto sobre el valor añadido, pero respecto a la que la ley determina que debe quedar al margen de este impuesto, liberando al consumidor del pago, y al sujeto pasivo (el empresario o profesional) de hacer la repercusión e ingresar luego el dinero en Hacienda.

Existen dos tipos de exenciones de IVA, las plenas y las limitadas. Son exenciones plenas aquellas en las que la empresa o el profesional no repercute el IVA en sus facturas al cliente, pero, sin embargo, sí se puede deducir el IVA que ha pagado por las compras o contrataciones de servicios que guarden relación con su actividad.

La exención plena se da básicamente en las operaciones de comercio exterior. Las exportaciones o entregas de bienes fuera del territorio de la Unión Europea, y las entregas intracomunitarias de bienes, cuando el destinatario del bien, o el servicio, es un empresario o profesional que reside en otro Estado miembro de la Unión Europea.

La exención es limitada cuando el autónomo o la empresa que no repercute el IVA en sus facturas tampoco puede deducirse el IVA soportado en las facturas que ha recibido de sus proveedores.

Los supuestos de exención del IVA limitado se dan en operaciones interiores como la asistencia sanitaria, las actividades educativas, las operaciones financieras y de seguros, las actividades culturales y las de asistencia social, entre otras. Independientemente del tipo de IVA de que se trate, en ambos casos de exención la operación está sujeta al IVA y, por tanto, al cliente se le debe expedir una factura, especificando que la misma está exenta de este impuesto.

Exenciones de IRPF

El impuesto sobre la renta de las personas físicas grava la obtención de renta por parte del obligado tributario. Rentas que pueden proceder del trabajo, del capital, de actividades económicas, de ganancias y pérdidas patrimoniales, o de rentas que resulten imputables según la ley.

No obstante, existen una serie de exenciones de IRPF; supuestos en los que el contribuyente obtiene renta, pero no debe tributar por ella. Están recogidos en el artículo 7 de la Ley del IRPF, pero podemos destacar algunos como las indemnizaciones derivadas de contrato de seguro de accidentes percibidas a consecuencia de responsabilidad civil por haber sufrido un daño, las indemnizaciones por despido o cese, las becas de estudios o el ingreso mínimo vital.

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